Nuestra melena sufre mucho ante las altas temperaturas y la cantidad de actividades que planeamos en verano: piscinas, playas, ríos, humedad constante, calor sin protección… Al terminar el verano nuestro pelo se reseca y se opaca, pero con los consejos que te daré a continuación voy a hacer que tu melena sea la envidia de estas vacaciones…¡y en tan sólo tres pasos!
Hidratación:
Lo más importante para lucir un cabello sano durante los meses de verano es mantenerlo hidratado. Compra productos especiales para ello, sustituye el acondicionar por las mascarillas con mayor efecto suavizante y una hidratación más intensa.
Además es importante aprovechar cada oportunidad para garantizar la máxima hidratación de tu cabello por eso te recomiendo:
Aplicar una buena mascarilla una vez a la semana. Puedes optar por una mascarilla de nuestra marca Kérastase, te recomiendo la mascarilla Maskeratine para aumentar la hidratación y reparar los posibles daños que ha sufrido tu melena.
Cuando vayas a la playa, el río o la piscina es muy importante aplicar una mascarilla hidratante con protección solar que te ayude a mantener a raya todos los agentes externos que pueden afectar la apariencia de tu pelo, si pruebas nuestro pack de Kérastase Sos Protección Solar-Cloro ¡no querrás utilizar otros productos!
Se trata de una pequeña inversión que hará que notes la diferencia.
Además es conveniente usar sombreros o gorras para proteger tu cabello de los rayos solares de forma efectiva.
Los profesionales del cabello: tus mejores aliados
Es imprescindible visitar a tu peluquero justo antes del verano para realizar un corte de puntas y eliminar la zona más seca y maltratada del cuero cabelludo. Te recomiendo volver cuando los días de calor hayan acabado con el fin de sanear tu cabello cortando el área que haya podido quedar maltratada.
No temas hacerte un corte con frecuencia, el pelo crece más sano, más rápido y más fuerte si saneas tu melena cortándote las puntas una vez al mes.
Una de las claves para cuidar el pelo en verano es no excederse con el secador y los alisadores, recuerda que el cabello es muy sensible a los cambios y las altas temperaturas y todo junto podría hacer que pierda vida rápidamente.
La playa o piscina ya no serán un problema
Una forma simple y efectiva de minimizar los daños causados por el agua salada o el cloro de la piscina es mojando tu pelo con agua corriente, es decir, haciendo uso de las duchas disponibles en playas y piscinas. Esto te ayudará a eliminar el exceso de sal y cloro de tu melena impidiendo que la misma se seque tras todo un día expuesta al sol.
Un paso muy sencillo que realmente hace la diferencia.